Resilientes, Seguras y Optimistas

 

Las emprendedoras latinas están determinadas a crecer, a pesar de la brecha de género y de las condiciones adversas

En Latinoamérica, el emprendimiento no es solamente una alternativa laboral para las mujeres sino una necesidad para llevar una diferencia en sus vidas, las de sus familias y las de sus comunidades.

Por Kiki del Valle

El COVID-19 significó un duro golpe para el empleo en general, aunque desafortunadamente, las mujeres se vieron aun más afectadas que los hombres. Según la Organización Internacional del Trabajo, el empleo femenino se redujo un 5% comparado con los hombres de 3.9% durante solo el primer año de la pandemia. En este contexto, y en línea con el trabajo remoto que impuso la pandemia dado poderoso alcance de la conectividad, el emprendimiento femenino ganó impulso en algunos países de la región.

El Índice Mastercard de Mujeres Emprendedoras es un estudio que refleja la situación del emprendimiento femenino en el mundo. En su quinta entrega, el índice muestra los progresos y desafíos que enfrentaron las mujeres de negocios en 65 economías del mundo durante el año pasado.

Aunque en la región latinoamericana subsiste la brecha de género y los marcos regulatorios no siempre alientan el emprendimiento, las emprendedoras latinas manifiestan sus ganas de seguir emprendiendo. En comparación con sus pares globales, la Tasa de Actividad Emprendedora en Chile y Uruguay es alta (más de 1 en 5 mujeres quieren montar un negocio propio) y -lo que es todavía más interesante- en algunas economías de la región, emprender se perfila como una oportunidad de negocio y no solamente una necesidad.

“... las latinoamericanas aspiran a seguir haciendo una diferencia en su familia y en su comunidad mediante el negocio propio.”

El emprendimiento femenino carga con algunos sesgos históricos incluyendo la idea de la mujer emprendedora enfocada en industrias específicas o la idea de trabajo por necesidad. En el área de servicios, por ejemplo, existen roles incorrectamente asociados 100% a la mujer -como la belleza o la cocina- mientras otras industrias como la de tecnología que no alcanzan un balance adecuado de genero. . Hoy, sabemos que las mujeres son uno de los activos más valiosos de la economía global. Por eso resulta tan alentador encontrar que, en Costa Rica, las emprendedoras superan en número a sus colegas hombres. Las mismas además, se destacan por un impulso de emprender basado en oportunidades de negocio y no estrictamente en la necesidad. 

Las condiciones favorables al emprendimiento y los marcos regulatorios varían según el país, revela el Índice Mastercard de Mujeres Emprendedoras, y también son dispares las oportunidades en educación, pero la encuesta refleja que las latinas son emprendedoras resilientes y optimistas. Aunque su acceso al financiamiento es bajo en comparación con otros países del mundo, las latinoamericanas aspiran a seguir haciendo una diferencia en su familia y en su comunidad mediante el negocio propio.

El alma de la recuperación

El Índice Mastercard de Mujeres Emprendedoras es una herramienta indispensable para estudiar los claroscuros del sector emprendedor a nivel regional y global. Y subraya la necesidad de formular políticas de género que mantengan viva la curiosidad y la chispa del espíritu emprendedor, cuyo aporte es clave para la recuperación económica de nuestra región.  

De cara al futuro, es importante continuar invirtiendo en educación porque las emprendedoras no sólo hacen una diferencia en sus comunidades, sino en la economía global, siempre y cuando manejen las herramientas digitales que definen el mundo de los negocios post-COVID. Como parte de nuestro compromiso de crear un mundo donde las mujeres de negocios estén igualmente representadas y apoyadas, Mastercard se ha comprometido en conectar a 25 millones de mujeres emprendedoras a la economía digital para el 2025 mediante entrenamiento, educación y las herramientas que les permitan acceder al financiamiento. En esta línea, aportamos nuestra experiencia y tecnología en varias iniciativas – la más reciente incluye el lanzamiento del programa TodasConectadas como parte de nuestra participación dentro de la Alianza Regional para la Digitalización de las Mujeres en América Latina y el Caribe.

Adicionalmente, y proyectando la incidencia de las emprendedoras del mañana, este mes llevamos a cabo nuestro segundo maratón regional de Girls4Tech, un programa centrado en un plan de estudios STEM exclusivo, interactivo y en formato virtual que busca impactar a 5 millones de niñas entre 8 y 16 años de 44 países para 2025.

Para Mastercard, empoderar a la mujer y crecer juntas es una prioridad. En el Mes Internacional de la Mujer, queremos especialmente resaltar sus iniciativas e inspirarlas para transformar la resiliencia en innovación, barreras en oportunidades y diferencias en inclusión.